Existen documentos de los siglos XVI y XVII que describen los primeros intentos de transfusión sanguínea, todos ellos sin éxito por el desconocimiento que se tenía hacia las particularidades de la sangre. No fue hasta principios del siglo XX cuando el doctor alemán Karl Landsteiner identificó en la superficie de los hematíes dos tipos de proteínas que variaban en función de cada persona.
Además de estos antígenos, a los que denominó A y B, el patólogo observó que el plasma de la sangre contiene dos tipos de anticuerpos que reaccionan con las proteínas de los glóbulos rojos y que denominó Anti-A y Anti-B. Mediante estos estudios elaboró una clasificación (ABO) que sigue vigente en nuestros días:
- Grupo A. Son aquellas personas cuyos glóbulos rojos manifiestan antígenos de tipo A en su superficie y anticuerpos contra los antígenos B en el plasma.
- Grupo B. Tienen glóbulos rojos con antígenos de tipo B y anticuerpos en el plasma de tipo A.
- Grupo AB. Tienen ambos antígenos en su superficie pero no fabrican ningún anticuerpo en el plasma contra A o B.
- Grupo 0. No presentan antígenos en su superficie pero tienen anticuerpos contra ambos tipos.
Aunque esto ya supuso un gran hito para la historia de la Medicina, el patólogo detectó reacciones en algunos pacientes que aparentemente eran compatibles, por lo que decidió continuar sus investigaciones y en 1940 descubrió el factor Rhesus, presente en el 85% de las personas (que eran por lo tanto positivas) mientras que el 15% restante no lo presentaban, por lo que son consideradas Rh negativo. De tal manera que a la clasificación del factor ABO, habría que sumar el Rh que da como resultado ocho tipos de grupos sanguíneos: AB+, AB-, A+, A-, B+, B-, 0+, 0-.

Gráfico porcentaje grupos sanguíneos en la población española
La importancia del grupo sanguíneo
Seguro que en muchas ocasiones has oído hablar de “los grupos sanguíneos más comunes o los más raros”. Lo cierto es que existen algunos tipos más habituales como A+ o 0+ (más del 30% de los españoles presentan alguno de estos dos grupos) y otros menos frecuentes como el AB- o B- que presentan menos del 2% de los ciudadanos.
Cabe destacar al grupo o- ya que puede donar a todos los grupos, y en contrapartida solo recibir 0-, debido a la ausencia de antígenos, y como antagonista al AB+ que puede ser receptor de cualquier donante pero sólo podrá dar sangre a aquellos con los que comparta grupo.
En tu centro de donación más cercano te darán más detalles pero puedes hacerte una idea consultando esta tabla para conocer a quién puedes donar tu sangre:

Tabla de compatibilidades entre grupos sanguíneos
Si quieres convertirte en donante, consulta nuestra web para saber más detalles. Además, podrás saber de forma actualizada los grupos que necesitan más donantes.